Mariel Armella ¿Te gusta el maquillaje natural? Si la respuesta es sí, aquí te traemos algunos consejos sobre cómo lograrlo de manera diaria.
Nos encanta vernos radiantes con un toque de maquillaje, pero de una forma natural. Para conseguir este efecto sutil y fresco, debemos seguir estos pasos:
1. LIMPIEZA DE LA PIEL
Este es un paso fundamental. Lava tu rostro con un jabón neutro (apto para todo tipo de pieles), o bien, con jabones líquidos o espumas limpiadoras. Masajea suavemente tu rostro con movimientos circulares, comenzando desde el centro hacia el exterior.
2. HIDRATACIÓN Y PROTECTOR SOLAR
Estos dos pasos son cruciales en tu rutina de cuidado facial. Aplica una crema hidratante adecuada a las necesidades de tu piel, seguida de un protector solar que, preferentemente, sea compatible con el maquillaje.
3. APLICACIÓN DE CORRECTORES
Una paleta de correctores te ofrece una gama de colores para abordar diferentes imperfecciones de la piel:
• El verde ayuda a disimular las rojeces.
• El amarillo es ideal para corregir ojeras moradas o hematomas.
• El azul neutraliza manchas amarillentas o naranjas.
• Los tonos lila o rosa sirven para disimular imperfecciones de color verdoso.
• El naranja es perfecto para contrarrestar manchas azuladas o las venas marcadas.
4. BASE DE MAQUILLAJE
Es crucial elegir una base que unifique el tono de tu piel y que sea lo suficientemente ligera como para pasar desapercibida. La clave es que tu piel se vea natural, perfecta tanto bajo la luz natural como artificial, de día y de noche. Si buscas una cobertura ligera, utiliza una esponja húmeda para aplicarla, y si prefieres una mayor cobertura, opta por una brocha.
5. POLVO COMPACTO
El polvo compacto ayuda a sellar el maquillaje y controlar el brillo durante el día, proporcionando un acabado mate y uniforme.
6. CONTORNO Y BRONCEADOR
El contorno tiene una mayor densidad que el bronceador. Mientras que el contorno define y esculpe el rostro, el bronceador aporta un toque cálido, como si la piel hubiera sido besada por el sol.
7. RUBOR E ILUMINADOR
El rubor se aplica en las mejillas, justo en la parte alta de los pómulos. El iluminador se coloca en la misma zona, pero sobre el rubor, para añadir un toque de luminosidad y frescura.
8. MAQUILLAJE DE OJOS Y CEJAS
Las cejas son el marco de los ojos, por lo que es fundamental definirlas bien. Utiliza un lápiz para rellenar cualquier espacio y darle forma. Para las sombras, escoge tonos neutros y tierra, que son ideales para un look diario y natural.
